Aplicaciones De Espejos Planos 3d1a3n

Aplicaciones de espejos planos

Horno solar Al hablar de un horno solar, se puede definir de la manera más sencilla como la combinación de un concentrador parabólico estacionario y un helióstato, que necesitan de la radiación proveniente de nuestro astro más cercano (el Sol) para poder funcionar óptimamente. El sistema de concentración de los hornos solares se basa en la doble reflexión de la radiación en un punto focal. Los helióstatos reflejan los rayos solares paralelos y horizontales sobre el disco parabólico que actúa como concentrador reflejándolos en un mismo punto, el foco. Para conseguir valores de concentración de la radiación tan elevados, el espejo reflector ha de ser de gran tamaño. El reflector debe seguir la trayectoria solar para conseguir la máxima captación posible; el problema está en la dificultad de movilizar un espejo de tales proporciones. La solución es la doble reflexión. El concentrador parabólico se mantiene fijo generalmente, para ello se dispone de un campo de helióstatos móviles que siguen la trayectoria solar y reflejan la radiación en el paraboloide. De esta manera, el concentrador recibe la radiación reflejada por los helióstatos y no la radiación directa del sol. Por otra parte, hay hornos solares que trabajan con un solo helióstato y también los hay aquellos que trabajan con un campo de helióstatos; es decir, la diferencia radica principalmente en el enfoque que este tenga, para cumplir con su función a la que estén destinados más adelante se hablara en particular de éstos. Algunas aplicaciones importantes que éstos tienen son: generación de electricidad, ensayos y análisis de materiales (en el tratamiento de superficies frente a la corrosión y desgaste, fundición de metales), en la industria aeronáutica y aeroespacial por las radiaciones intensas etc. Los hornos solares están conformados principalmente por:

Helióstatos: Un heliostato o helióstato es un conjunto de espejos que se mueven sobre dos ejes normalmente en montura altazimutal (altura y azimut), lo que permite, con los movimientos apropiados, mantener el reflejo de los rayos solares que inciden sobre él en todo momento en un punto o pequeña superficie, deshaciendo en el rayo reflejado el movimiento diurno terrestre. Concentrador: El concentrador es la parte fundamental del horno solar, es un conjunto de espejos que concentran la luz incidente proveniente de los helióstatos, multiplicando la energía radiante en la zona focal. Este elemento, que concentra los rayos que llegan paralelos al eje, consiste en un conjunto de facetas de mayor o menor tamaño en disposición paraboloide para favorecer una mejor focalización. Foco receptor: Es el elemento en el que se concentra toda la radiación. El tamaño focal varía de una instalación a otra. El tamaño de la imagen reflejada depende de la longitud focal.

En conjunto esos elementos funcionan armónicamente como se muestra en el siguiente dibujo esquemático: