Astrología de grados Extracto del Astroglosario
Bruno Huber Astrología de grados, grados simbólicos, destino de los grados, monómeros, miriogénesis. Una concepción que tiene sus raíces en la Antigüedad, y que sostiene que cada grado del zodíaco tiene su propia cualidad. En la literatura astrológica, se atribuye tradicionalmente a los griegos. Esto se debe a que el escritor romano Firmicus Maternus que, en el octavo libro de su única obra astrológica (la poesía didáctica «Mathesis»), afirma que la «Miriogénesis» (así denomina al conocimiento del destino de los grados) proviene de los helenos. No obstante, nuevas fuentes señalan que la historia de su origen puede trazarse hasta los sumerios. Según una leyenda, Hermes Trismegistos formuló descripciones para los 21.600 minutos de arco del zodíaco. La colección de 360 grados con imágenes del Ascendente más antigua que se conoce es la que dejó Pietro d´Abano en su Astrolabium Planum.
D´Abano la recogió del astrólogo judío-árabe Ibn Ezra, que vivió en España y después en Florencia en el siglo XII. Para cada grado del zodíaco (empezando en 0º Aries) contiene una imagen simbólica reproducida a partir de una talla en madera, acompañada de un texto Pietro d´Abano de dos líneas en latín. La primera (1250-1315) línea describe la imagen y la segunda la interpreta. Además, al principio de cada uno de los signos hay una imagen con su símbolo y una triple viñeta con la representación de cada uno de los decanatos del signo. Su forma original ya se menciona en el Enuma Anu Enlil (687 a.C.), la colección de presagios babilónica. Antes de poder dividir el zodíaco en signos zodiacales y grados, los astrónomos babilonios intentaron realizar una división refinada y para ello emplearon marcas naturales, esto es, las estrellas fijas cercanas a la eclíptica, definiendo de este modo pequeños sectores del zodíaco. Sus diferentes cualidades se observaron a través de los siglos en las estrellas que ascendían en el hori-
zonte este (horoscopium). A partir de este material básico, durante los siglos VII al X, en la zona árabe se formularon, en forma de aforismos, los destinos de los 360 grados. (El autor y el lugar de origen no se han podido determinar hasta el momento).
En el año 1500, un astrólogo y matemático bávaro, llamado Johannes Engel (Angelus, 1463-1512) realizó una copia del mismo, realizando una versión en alemán con sus propios grabados en madera (parte del manuscrito de Heidelberger n º 832).
En los siguientes siglos, el Astrolabium Planum de Pietro d´Abano, con sus indicaciones de destino de fácil manejo (imágenes relacionadas con el grado del Ascendente), contribuyó mucho a la popularización de la astrología.
A partir de ese momento, ha habido una gran cantidad de intentos de distintios autores para producir imágenes «mejores» o «más comprensibles»: Volasfera, Charubel, Alan Leo, M. E. Jones, Mathews, Carelli, etc.
La sala cupular del Salón de Padua del Palazzo de la Ragione (200 m de largo) – una curiosidad astrológica.
En el 1310, se empezó el diseño de un fresco gigantesco (ca. 400 m.) según el modelo de D´Abano en el edificio del tribunal de Padua («Il salone»), a cargo, nada menos que de el famoso Giotto. Hoy, este fresco todavía puede visitarse.
Con excepción de Volasfera, todos estos autores pertenecen a los últimos 150 años (y no son todos los que lo han intentado). Entre todos los autores sólo hay una cosa en común: que no tienen nada en común. Dando un vistazo a las distintas obras puede verificarse que apenas hay dos imágenes similares, (por más que se ponga toda la voluntad en la interpretación de las mismas). ¿Qué versión es la correcta? Sólo queda una posibilidad, que el autor ha comprobado por sí mismo muchas veces: observar el efecto psicológico de las imágenes en las personas en cuestión.
En este sentido, desde el punto de vista de la psicología profunda, dos de las mencionadas obras se perfilan como efectivas: el Astrolabium Planum de Pietro d´Abano y los Símbolos sabianos de M. E. Jones. Esta última obra, cuyo sistema desarrolló Jones en los años 20 con ayuda de una medium fue incluida por Dane Rudhyar (con comentarios) en su primer libro Astrología de la personalidad. Desde hace algunos años la versión alemana está en el mercado pero, desafortunadamente, la traducción de un autor tan exigente no es nada fácil. Esto es aplicable especialmente a los símbolos sabianos que están escritos en un lenguaje algo antiguo pero muy poético – en parte la traducción desfigura el sentido.
Astrolabium Planum; a la izquierda, versión original de Pietro d´Abano; a la derecha, la copia de Angelus en el manuscrito de Heidelberger nº 832.
Bibliografía:
Durante mucho tiempo ha sido imposible trabajar con el Astrolabium Planum, puesto que no se editaba desde hace unos 200 años. Ahora, la editorial März de Berlín ha editado un volumen con las imágenes originales, con las traducciones de los textos y con un comentario psicológico a cargo de H. Schmatzberger. En este caso también es mejor si se sabe latín (los textos originales están incluídos), pues esta traducción no es demasiado lograda.
Astrolabio Plano, Johannes Engel, Edición de Ibercaja, Zaragoza, 1995. ISBN 84-88793-42-1 Un mandala astrológico, Dane Rudhyar, Luis Cárcamo Editor, 1983. Sabian symbols, Marc Edmund Jones, Sabian Publ. Co., Stanwood WA/USA, 1941. Das aufsteigende Zeichen, Herbert Schmatzberger, Ed. März, Berlín, 1983.
Astrolabio Plano El nombre resulta un tanto engañoso pues no tiene nada que ver con el cálculo de horóscopos sino con su interpretación. Se trata de una serie de dibujos o imágenes astrológicas de los «destinos de los grados», publicado en el siglo XIII por Pietro d´Abano. Consta de 360 ilustraciones, cada una de las cuales representa la cualidad (o el «destino») de un grado del zodíaco, acompañadas de un aforismo de dos líneas. Además, contiene también 36 dibujos de decanatos y 12 de meses (signos zodiacales).
rácter individual y como sello del destino humano. Por eso, en la Edad Media, estas ilustraciones recibían el nombre de «dibujos del Ascendente». Este sencillo procedimiento es análogo a lo que se hacía en los inicios de la astrología: la lectura del horoskopium (griego: ora skopeo = mirar la hora) que, como elemento para la determinación del destino de la persona, sólo consideraba el planeta o la estrella fija que ascendían en el horizonte, en el momento del nacimiento de la persona.
D' Abano es el primer autor conocido de estos Monómeros, cuyo origen se remonta a hace más de 2.700 años en Babilonia. El Astrolabium Planum fue muy popular hasta el siglo XVI y fue copiado muchas veces, lo cual ha ocasionado algunas desfiguraciones importantes. En su uso popular, se utilizaba fundamentalmente el grado del Ascendente. La ilustración correspondiente y la sentencia acompañante se consideraban como indicadores del ca-
Ilustración de 20º Piscis.
Desafortunadamente, el original de d´Abano no se ha conservado íntegro. No obstante, en el manuscrito nº 832 de Heidelberg hay una copia completa bastante buena del de Angelus (1500) y, por otra parte, el famoso pintor Giotto eternizó las imágenes en el ciclo de frescos del «Salone»" (Palazzo della Ragione) de Padua, según el original por entonces (1309) aún existente. Desventuradamente, en siglos posteriores, el destino relativizó esta inmortalización con dos incendios que dejaron algunos frescos en mal estado y que no pudieron restaurarse debido a la falta del modelo original.
rar el grado del Ascendente como indicador del destino y como clave para la interpretación del carácter. No obstante, el autor, Herbert Schmatzberger recomienda utilizar también el grado del Medio Cielo (MC) y el de la posición del Sol. Desgraciadamente, la traducción al alemán de los aforismos de los grados no es muy acertada y muchos de ellos, o bien carecen de sentido, o bien tienen un sentido distinto al del original.
Piscis
Ilustraciones de los decanatos del signo Piscis
En 1983 la editorial März de Berlín publicó de nuevo la versión en latín de Angelus, con imágenes obtenidas de grabados sobre madera originales y con la indicación tradicional de la Edad Media, de conside-
Por otra parte, los comentarios redactados por el autor, a veces van más allá del verdadero sentido del grado en cuestión. De todas formas, su principal mérito es haber hecho accesible de nuevo este antiguo tesoro de la astrología. El Astrolabium Planum es un aspecto de la astrología de grados, área astrológica un poco descuidada en
la actualidad. No obstante, dentro de la misma, ocupa un lugar especialmente destacado debido a la asombrosa profundidad de su contenido psicológico. Se recomienda no utilizar sólo los grados correspondientes a las posiciones del AC, MC y del Sol. Las posiciones del resto de planetas o incluso la posición exacta del punto de la edad también pueden aportar luz en la interpretación del horóscopo. Si se hace con un enfoque meditativo (de forma parecida a una tirada de tarot), es decir, sin enfatizar demasiado la comprensión verbal, inesperadamente uno se encuentra con profundos contenidos simbólicos que indican claramente que estas ilustraciones constituyen un importante fondo simbólico de gran antigüedad, formado durante largas épocas de experiencia. Derecha: Portada de la edición en castellano de Ibercaja, 1995 ISBN 84-88793-42-1
Traducción: Joan Solé, 2000-2008