Decreto 1449 De 1977 Art 1 - 4 3v4z2m

DECRETO 1449 DE 1977 Para comenzar se establece que los propietarios rurales de predios han cumplido en lo básico de las normas establecidas sobre la conservación de los recursos naturales renovables. Por otro lado, se determinan las obligaciones que tienen los dueños de los predios en lo referente a la conservación, protección y aprovechamiento de las aguas, dentro de las cuales se encuentran: no incorporar sustancias solidas, liquidas o gaseosas o cualquier sustancia toxica en las aguas, ajustarse a las normas establecidas para la protección de los recursos, en materia de la aplicación de productos agroquímicos, no provocar la alteración del flujo natural de las aguas o el cambio de su lecho o cauce, no usar mayor cantidad de agua que la otorgada en la concesión, construir y mantener la instalaciones y obras hidráulicas en las mejores condiciones, velar porque las aguas que deriven de una corriente o deposito no se derramen, contribuir a la conservación de las estructuras hidráulicas y demás obras e instalaciones comunes, construir pozos sépticos cuando no existan sistemas de alcantarillado y conservar en buen estado de limpieza los cauces y depósitos de agua naturales o artificiales que existan en sus predios. En lo que tiene que ver con la protección y conservación de los bosques, los dueños de los predios tienen las siguientes obligaciones: mantener en cobertura boscosa dentro del predio las áreas forestales protectoras, proteger los ejemplares de la flora silvestre vedadas que existan dentro del predio y cumplir con las normas relacionadas con la prevención de incendios, plagas forestales y el control de quemas. Se determina que los propietarios de predios de más de 50 hectáreas deberán mantener en cobertura forestal por lo menos un 10% de su extensión y que para establecer el cumplimiento de esta obligación se tendrá en cuenta la cobertura forestal de las áreas protectoras y de aquellas otras en donde se encuentran establecidas cercas vivas, barreras cortafuegos o protectoras de taludes, de vías de comunicación o de canales que estén dentro de su propiedad. Por otra parte se estípula que se debe mantener una proporción del 20% de la extensión del terreno en cobertura forestal para los terrenos baldíos con un área mayor a 50 hectáreas. Aunque este porcentaje se podría variar o modificar cuando el Inderena lo considerara pertinente. En lo que corresponde a la protección y conservación de la fauna terrestre y acuática, este decreto se remite en algunas de sus normas directamente al decreto 2811 de 1974; por ejemplo los propietarios de predios pueden conocer las conductas que están catalogadas como prohibidas en la ley de 1974, también la persona debe informar a la autoridad si en su predio se encuentran nichos o

hábitats de especies protegidas, este también deberá impedir que por terceros no se incumplan estas normas, especialmente en cuanto se refiere a la contaminación de las aguas o de la atmósfera con elementos que destruyan la fauna silvestre, acuática o terrestre, y la casa y la pesca de especies vedadas o en tiempo o áreas vedadas o con métodos prohibidos. Y en el caso de que se llegue a presentar alguno de estos casos la persona deberá informar a la autoridad encargada. Toda propiedad devenga una responsabilidad, esto confiere al propietario una obligación en la protección y conservación de los suelos; para ello el uso del suelo debe estar de acuerdo a sus condiciones y factores óptimos para la producción productora, este estudio será proporcionado por el IGAC y se hará de acuerdo a las indicaciones del ICA y el INDERENA, si el predio es utilizado para la agricultura se deberá utilizar técnicas adecuadas de cultivos y manejo del suelo, evitando así: la erosión, compactación, la salinización que ocurre con el uso intensivo de este y que acarrea la degradación del suelo, si por otro lado da un uso su uso al suelo de ganadería el propietario se comprometerá a mantener la cobertura vegetal de los terrenos en donde realice dicha actividad, para evitar la formación de caminos que produce esta actividad y conllevan al degradamiento del suelo, los predios que se encuentren cerca de vías o caminos deberán mantener la cobertura vegetal protectora de los taludes para evitar a futuro deslizamientos o remociones en masa. Otra obligación correspondiente a los propietarios es suministrar datos y documentos requeridos al Inderena, esto con la finalidad de supervisar el cumplimiento de las obligaciones que se contiene en este decreto; y de igual forma informar oportunamente a esta entidad si dentro de sus predios o alrededores se está presentando un deterioro de los recursos por causa natural o antropogénica, pero así, como los propietarios son responsables de sus predios, el INDERENA es responsable de no causar detrimentos a los recursos naturales, debido al otorgamiento de licencias, permiso y autorizaciones que permitan el uso inadecuado de dichos recursos. Este Decreto rige a partir de la fecha de su publicación en el Diario Oficial. Comuníquese y cúmplase. Dado en Bogotá, D.E., a 27 de junio de 1977. El Presidente de la República, ALFONSO LÓPEZ MICHELSEN. El Ministro de Agricultura, ALVARO ARAÚJO NOGUERA.