ORACION DEL SANTO JUSTO JUEZ
¡Oh divino JUSTO JUEZ! A quien adoro rendido. Hoy postrado aqui a tus pies, el perdón Señor te pido. JUSTO JUEZ esclarecido, protector universal. A ti te pido, rendido, me libres de todo mal. En peligroso lugar, quita el mal pensamiento d todos los que de intento me quieran asesinar Y si algún hombre criminal piensa quitarme la vida, en vereda o en camino real, tú, Señor, serás mi éguida. Que me valga esta oración, Cristo mio crucificado, y la llaga de tu costado será mi dulce habitación. Tan sólo con implorar tu santo nobre glorioso, haz que salga victorioso, del que me quiera robar; ¡Oh Santisimo Sacramento! De enemigos y salteadores, bandidos y malhechores, librame en todo momento. Y Tu, Virgen, Sagrada María, te pido de corazón que en mi última agonia, me prestes tu protección. ¡Oh Sacratisima Cruz de la gran ciudad de Sión! Te ofrezco esta oración diciéndote: Amén Jesus.
Jesucristo se levanta y a sus discípulos llama. Mas viéndolos a todos juntos de esta manera les habla: Quién de vosotros, hermanos, morirá por mí mañana? Se ven unos a los otros y ninguno responde nada, si no es que San Juan Bautista, que predicó en la montaña. Esa muerte, Señor mío, para vos está nombrada. De ahí sale una mujer, que Verónica se llama. Le limpió el Sagrado Rostro y tres figuras figuraba Una está en Jey la otra en Roma y la otra en el Cielo está. --------------------------------El que esta oración rezare los siete viernes de Cuaresma
saldrá su Alma limpia y pura como la luz de una estrella.
ORACIÓN DEL SANTO JUSTO JUEZ Magnifica Blanca de la Oración del Santo Justo Juez, el divino autor y la Santísima Trinidad; hallada en el Santo Sepulcro y quien lo encontró y usó fue el Glorioso San Cipriano Justo Juez Rey de los Reyes y Señor que siempre reina con el Padre el Hijo y el Espíritu Santos Divino. Señor ayúdame, líbrame y favoréceme sea en el mar, en el aire o en la tierra, de todos quienes a ofenderme vienen, así como libraste al Apóstol San Pablo y al Santo Profeta Jonás quien salió libre del vientre de la ballena; así gran Santo Justo Juez favoréceme, pues, yo soy tu devoto en las empresas que acometa, como en toda clase de juegos y en el juego de gallos, y en parajes, valiéndome del Santo Justo Juez, del Divino autor de la Santísima Trinidad de estas santas reliquias me sirva esta Santa oración de ayuda para defenderme de todo: de las comisiones y de los campos de batalla, no me ofendan las balas ni las armas blancas, las armas de mis enemigos que sean todas quebradas, las espadas, los sables, los puñales, como las armas de fuego queden magnetizadas y las mías sean aventajadas y nunca vencidas y todos mis enemigos caigan indefensos a mis pies, así como los judíos cayeron a los pies de Jesucristo; rómpase las prisiones, los grillos, las cadenas, las chavetas, los candados, las esposas, los cordeles y ábranse las puertas del Divino, cuna de Abraham o sean conmigo las llaves de San Pedro, la Lanza de Longinos, la Espada del Arcángel, para que no sea en fuego quemado ni en agua ahogado ni en la batalla muerto, ni en amor traicionado , antes bien salvado de todo peligro por la Santa Cruz; En cruz rezo esta Santa Oración para que me dé paz a mi espíritu, tranquilidad en mi hogar, salud en mi cuerpo, dinero en mi bolsillo y el amor del ser que quiero, con esta creación y pase con felicidad. Divino Señor, como soberano Santuario fuisteis en Belén perseguido por el Rey Herodes y te adoraron los tres Reyes Magos del Oriente y bautizado a orillas de Jordán, lo salvasteis al buen ladrón Dimas y te dieron sepultura Santa en Jerusalén, y nos diereis Gran Señor en este Paraíso las virtudes siguientes para hombre o mujer, sea feliz, Divino Señor, por tu Santísima Pasión no me ofendan ni mis enemigos, ni los peces del mar; ni las fieras terrestres ni las víboras ponzoñosas, ni los brujos hechiceros, ni Satanás, ni las comisiones, pero con el Manto de Maria Santísima sea abrigado y de las comisiones me haga invisible, ojos tengan y no me vean, oídos tengan y no me oigan sentidos tengan y no me sientan, manos tengan y no me agarren, pies tengan y no me sigan, aunque bravos vengan como un león, mansos lleguen a mis pies, como corderos, tan solo rezando esta Divina Oración, y si no se sabe de memoria he de saber leer, se santigüe con esta Divina Oración al acostarse a la cama y al levantarse y ganan cien días de indulgencias, en su predicción sea en agricultura o en comercio, y también y seas feliz en la cría de todo género de animales. Dios guarde mi casa, el Espíritu Santo guarde mi cama, Virgen Maria guarde mi cuerpo, y la santísima
Trinidad me libre de todo mal y peligros, en el Nombre del Santo Juez el Divino Dador y la fuerza en fe con que invoquen esta Oración. En el Huerto de Diviseo está San Juan, Hiyómino Deu Señor, si a mis enemigos ves venir, déjalos venir y guárdame a mí, a mi familia y a todos quienes estén conmigo, pues de mí traen los ojos vendados y el corazón amartillado. Con el Paño de la Pasión y la Patena, en el Cáliz voy cubierto y no sea preso, ni herido, ni muerto. En mi corazón tengo la Sangre de nuestro Señor Jesucristo y no la quiero dar, a SOBENARO BAJENARO, válganme las palabras que he consagrado. JESÚS, MARÍA Y JOSÉ-Amén. Si quieren tener virtudes, dinero, amor, poder dominar a todos tanto a los hombres como a las mujeres, deben rezar al acostarse esta Divina Oración todos los viernes, con 1 Credo y 6 Padres Nuestros. NOTA.- Esta Santa Oración fue hallada en el SANTO SEPULCRO por el glorioso San Cipriano y quien la tenga en la casa o la lleve consigo y la rece, estará libre de enemigos, ladrones y criminal.