IGLESIA EVANGELICA JESÙS EL ALTÌSIMO
FORMACIÓN EN LA PREDICACIÓN CRISTO-CÉNTRICA
“Esfuérzate por presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse y que interpreta rectamente la palabra de verdad” 2 Timoteo 2:15
Introducción: Se podría decir que existen dos extremos en la que los predicadores y maestros de la escritura recurren. Por un lado, la enseñanza o predicación moralista. Esta tiene como propósito llamar a las personas a una vida santa. Tiene una genuina motivación de animar a los creyentes a que viven agradando a Dios. La desventaja de esto es que hay una ausencia del evangelio. Por otro lado, la enseñanza o predicación alegórica. Su propósito es mostrar en cada texto a Cristo. La desventaja es que se quiere mostrar a Cristo en todas partes donde el texto no lo muestra. Existe una tercera manera de predicar y enseñar las escrituras. Es la manera Cristocéntrica. El propósito de este método es presentar a Cristo desde toda la escritura para llamar a la salvación a los no cristianos y a la santidad a los cristianos. Cualquier expositor temeroso de Dios, creyente de la Biblia, justificado por la fe solamente, desea honrar a Cristo y seguir el inolvidable e innegable testimonio de Pablo: “Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos de ustedes por amor de Jesús.” (2 Cor 4, 5). Los defensores y practicantes de la predicación Cristo-céntrica (PCC) casi siempre tienen una visión elevada de Dios y de las Escrituras. Por lo tanto, ellos sustentan su énfasis de predicación con el deseo de exaltar a Cristo y ser fieles a la Escritura. Hay textos bíblicos que sustentan y demuestran la predicación PCC: “Y les dijo: Esto es lo que yo os decía cuando todavía estaba con vosotros: que era necesario que se cumpliera todo lo que sobre mí está escrito en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos. Entonces les abrió la mente para que comprendieran las Escrituras, y les dijo: Así está escrito, que el Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos al tercer día; y que en su nombre se predicara el arrepentimiento para el perdón de los pecados a todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. Vosotros sois testigos de estas cosas” (Lucas 24:44-48) Examináis las Escrituras porque vosotros pensáis que en ellas tenéis vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí (Juan 5:39) “Entonces Felipe abrió su boca, y comenzando desde esta Escritura, le anunció el evangelio de Jesús” (Hechos 8:35).
Tanto Jesús como los apóstoles usaron las escrituras (A.T) para predicar el evangelio, o sea predicar a Cristo desde el A.T, como lo vemos en los textos citados.
Propósito: Que el predicador o maestro de las escritura sea fiel en la exposición de la escritura. Que no exponga las escrituras de una manera moralista pero tampoco alegorista. Que su meta sea la gloria de Dios, al mostrar la cruz de Cristo, como el único fundamento para la salvación y única motivación de vivir agradecido y en santidad. Cursos: 1.- Como predicar y enseñar desde el Antiguo Testamento Libro: Predicación y Enseñanza desde el Antiguo Testamento Autor: Walter C. Kaiser Jr. 2.- Teología Bíblica Libro: Estrategia Divina: Una teología Bíblica de la Salvación Autor: Graeme Goldsworthy 3.- Predicación Expositiva Libro: La Predicación Biblica Autor: Haddon W. Robinson 4.- Renovación Espiritual Libros/Guías: Dinamicas de Renovación y La oración Autor: Timothy Keller