Función biocatalizadora: Los lípidos favorecen o facilitan las reacciones químicas que se producen en los seres vivos.Cumplen esta función las vitaminas lipídicas , hormonas esteroideas y prostaglandinas Función dinámica o biocatalizadora: realizan esta función las vitaminas lipídicas, las hormonas esteroideas, los ácidos biliares y las prostaglandinas. Aunque los lípidos forman una clase bien definida, con frecuencia se presentan combinados con otras clases de biomoléculas formando así moléculas híbridas, tales como glucolípidos o lipoproteínas. En estas biomoléculas las propiedades características de los componentes están fusionadas para cumplir funciones biológicas especializadas. Función biocatalizadora: los lípidos también pueden facilitar las reacciones químicas que se dan en los seres vivos; este es el caso de las vitaminas lipídicas A, K, D y E, las hormonas esteroideas (como las hormonas sexuales y suprarrenales) y las prostaglandinas.
Vitaminas lipidicas Vitaminas, como la vit.A, vit. E, vit.K.
Hormonas esteroideas Los esteroides son lípidos que
derivan de una molécula llamada esterano o ciclopentanoperhidrofenantreno (molécula con cuatro anillos).
Comprende varios grupos de sustancias: - Esteroles: Como el colesterol y las vitaminas D. El colesterol forma parte estructural de las membranas a las que confiere estabilidad. Es la molécula base que sirve para la síntesis de casi todos los esteroides. Como las hormonas suprarrenales y las hormonas sexuales.
Entre las hormonas sexuales se encuentran la progesterona que prepara los órganos sexuales femeninos para la gestación y la testosterona responsable de los caracteres sexuales masculinos. Entre las hormonas suprarrenales se encuentra la cortisona, que actúa en el metabolismo de los glúcidos, regulando la síntesis de glucógeno.
Acidos biliares: se sintetizan en el hígado y actúan facilitando la absorción de los triglicéridos y vitaminas liposolubles de la dieta (especialmente la vitamina D del intestino). Representan la única vía significativa por la que se puede excretar el colesterol. Prostaglandinas: Las prostaglandinas son lípidos cuya molécula básica está constituída por 20 átomos de carbono que forman un anillo ciclopentano y dos cadenas alifáticas.
Las funciones son diversas. Entre ellas destaca la producción de sustancias que regulan la coagulación de la sangre y cierre de las heridas; la aparición de la fiebre como defensa de las infecciones; la reducción de la secreción de jugos gástricos. Funcionan como hormonas locales.
Función amortiguadora: Son buenos amortiguadores mecánicos. Absorben la energía de los golpes y, por ello, protegen estructuras sensibles o estructuras que sufren continuo rozamiento. Amortiguadores mecánicos. Absorben la energía de los golpes y, por ello, protegen estructuras sensibles o estructuras que sufren continuo rozamiento. El tejido adiposo, por un lado cumple funciones mecánicas: una de ellas es servir como amortiguador, protegiendo y manteniendo en su lugar los órganos internos así como a otras estructuras más externas del cuerpo, y también tiene funciones metabólicas y es el encargado de generar grasas para el organismo. Entre las células del tejido adiposo blanco se han observado tabiques de tejido conectivo probablemente relacionados con la función de amortiguación. Las grasas corporales funcionan también como amortiguador mecánico para proteger a los tejidos, por ejemplo: la grasa que rodea a los riñones, el corazón y el intestino. La grasa subcutánea protege también al cuerpo de los agentes mecánicos externos y además funciona como un aislante térmico que protege a los organismos de las bajas temperaturas. En algunas zonas del cuerpo el tejido no libera sus lípidos y actúa como amortiguador de golpes y para el sostén del cuerpo, por ejemplo: la grasa que rodea lo riñones, las orbitas oculares, las rodillas, las palmas de las manos y las plantas de los pies.
Cada célula adiposa esta rodeada por una lamina externa, alrededor de la cual esta una fina red de fibras reticulares. El tejido adiposo posee rica vascularización, pese a que el citoplasma es una pequeña porción de la célula.
En sitios donde este tejido tiene función amortiguadora de golpes, por ejemplo en la región glútea la grasa esta dividida en cámaras por gruesos tabiques de tejido conectivo entre la piel y las fascias musculares. En ayuno prolongado los lípidos son liberados.
Este tipo de tejido se distribuye como grasa subcutánea, en el panículo adiposo, en el mesenterio o en la zona retroperitoneal. En los niños una capa uniforme cubre todo el cuerpo. En la mujer las regiones donde se encuentra son: las mamas, las caderas, las nalgas y los muslos, mientras que en hombre esta en la nuca, la parte inferior del vientre y la espalda y los flancos.
El tejido adiposo o tejido graso es el tejido de origen mesenquimal (un tipo de tejido conjuntivo) conformado por la asociación de células que acumulan lípidos en su citoplasma: los adipocitos. El tejido adiposo, sirve como amortiguador, protegiendo y manteniendo en su lugar los órganos internos así como a otras estructuras más externas del cuerpo, es el encargado de generar grasas para el organismo; otra función es la reserva de energía y aporte de calor. Existen dos tipos de tejido adiposo, tejido adiposo blanco (o unilocular) y el tejido adiposo marrón, grasa parda (o multilocular) El tejido adiposo blanco Corresponde a la variedad de tejido adiposo más corriente en adultos. Sus células son polihédricas, miden entre 50 y 150 Um de diámetro y contienen una sola gota de lípido que llena todo el citoplasma desplazando los organelos hacia la periferia. Al microscopio de luz cada célula aparece como un pequeño anillo de citoplasma rodeando una vacuola, resultado de la disolución de la gota lipídica, y que contiene un núcleo excéntrico y aplanado. El tejido adiposo marrón es abundante en el feto y recién nacidos que tiene como única función la producción de calor. El lípido es acumulado en el citoplasma en forma de gotas de un tamaño no muy grande, rodeadas de numerosas mitocondrias, gracias a lo cual debe su característico color marrón. El núcleo tiene una localización menos excéntrica que en el tejido unilocular.
Adipocitos : También llamados células adiposas , son las células del tejido conectivo que almacenan triglicéridos (grasas) . Se encuentran debajo de la piel y rodeando a órganos como el corazón y los riñones. Los adipocitos derivan de los fibroblastos. Como tienen en su interior una gran gota de triglicéridos , el citoplasma y el núcleo de estas células son rechazados a la periferia. El tejido adiposo se encuentra donde hay tejido conectivo areolar. Actua como aislante y de tal modo reduce la perdida de calor a través de la piel. Y en general brinda soporte y protección a diversos órganos. A medida que una persona aumenta de peso, la cantidad de tejido adiposo se incrementa y se forman al mismo tiempo nuevos vasos sanguíneos. Como consecuencia una persona obesa tiene muchos más vasos sanguíneos que una persona delgada. El tejido adiposo está constituido por los adipocitos y el tejido intercelular. Los primeros están adaptados para almacenar (y liberar) ácidos grasos bajo la forma de triglicéridos, reunidos en una gota citoplasmática única. El núcleo del adipocito queda ubicado en situación periférica, dándole el clásico aspecto de anillo de sello. El tamaño adipocitario varía entre 10 a 100de acuerdo al estado nutricional, pues los adipocitos modifican sus diámetros y consecuentemente su volumen, según almacenen más o menos triglicéridos. Estos cambios son posibles debido a la elasticidad de su membrana plasmática, que le permite aumentar notablemente su volumen antes de alcanzar
el "tamaño crítico", a partir del cual se pone en marcha el mecanismo de reproducción adipocitaria. Cada adipocito subcutáneo almacena hasta 1.2 gr de triglicéridos, aunque en los individuos de peso normal su contenido es de 0.4 a 0.6 7gr por célula. Considerando que el número promedio de adipocitos es de 30 a 60 x 109 y que cada uno contiene 0.5 7gr de triglicéridos, el depósito graso total puede estimarse de la siguiente manera: 30 a 60 x 109 0.5 = 15 kg, que equivalen a unas 135.000 kcal (6). Cada kilogramo de grasa provee unas 9.000 kcal, mientras que cada kg de tejido adiposo unas 7.500. Músculo y tejido adiposo: en estado postprandial, los triglicéridos llegan a los capilares del músculo y del tejido adiposo transportados por los quilomicrones y las VLDL, desde donde sus ácidos grasos son liberados por acción de la enzima lipoproteína lipasa (LPL). La mitad de los ácidos grasos y todos los monoglicéridos liberados, ingresan en los adipocitos o en las células musculares por diferencia de concentración (13), o por medio de un receptor específico.