PROCESO DE DELEGACION DE AUTORIDAD
WILFREDO VIZCAINO CORTES
FUNDAMENTOS DE ISTRACION PROGRAMA DE ISTRACION MARITIMA Y FLUVIAL
UNIVERSIDAD AUTONOMA DEL CARIBE BARRANQUILLA 2011
PROCESO DE DELEGACION DE AUTORIDAD
El proceso completo de la delegación de autoridad implica los siguientes pasos:
1. Definir los objetivos y las tareas. A partir de tener los objetivos que se quieren alcanzar se deben definir las tareas que se van a delegar, tratando no sólo de delegar los asuntos rutinarios sino también las tareas que exigen reflexión e iniciativas, tareas importantes, atrayentes y agradables.
2. Selección del subordinado. Debe seleccionarse al subordinado que posea capacidades y cualidades para desarrollar la tarea, cuidando no delegar siempre en los más competentes.
3. Asignación de la tarea y transmisión de la capacidad de mando. Debe transmitirse todo el poder necesario para la realización de la tarea, procurando ser claro, preciso y transmitiendo toda la información necesaria.
4. Exigencia de la responsabilidad por el logro de la tarea. Debe establecerse un sistema de control que garantice el cumplimiento de la tarea, lo que implica que debe delegarse pero no abdicar, es decir, no abandonar la tarea.
El proceso de delegación es el mecanismo a través del cual se estructuran todas las organizaciones. A medida que las organizaciones van creciendo se necesitan más personas para que desempeñen un grupo mayor de funciones y éstas deben ir acompañadas de la autoridad necesaria para poderla desarrollar.
Sin embargo a pesar de ser un concepto tan importante, encierra una gran paradoja, que quedará clara cuando veamos el concepto de responsabilidad.
Responsabilidad: Es el deber que tiene toda persona de hacer un uso óptimo de los recursos sobre los que tiene autoridad, de modo que se utilicen para cumplir los objetivos deseados.
La paradoja consiste en que la autoridad es imprescindible que se delegue para que la organización pueda cumplir eficazmente sus objetivos, sin embargo la responsabilidad no se puede delegar. Esto significa que cuando se delega autoridad, se está dando la posibilidad a otra persona para que decida sobre algo, sin embargo la responsabilidad ante el jefe superior de que las cosas se hagan bien siguen siendo de la persona delegante, lo que lleva a muchos gerentes a que traten de delegar la menor cantidad de autoridad posible.
Existen unos principios básicos inherentes al proceso de delegación de autoridad los cuales son: Principio de autoridad y de responsabilidad: la autoridad delegada debe ser proporcional a la autoridad que se asigna. Principio de definición funcional: cuanto más claramente se definan los resultados previstos, las actividades, los límites, los canales de información... Mayor será la posibilidad de que se cumpla la Misión del director. Principio escalar: cuanto más clara sea la línea de autoridad, más eficaz será la toma de decisiones. Principio de nivel de autoridad: las decisiones que sean de la competencia de un director debe tomarlas él y no referirlas a un superior. Principio de unidad de mando: cuanto más completa sea la dependencia de un empleado a un solo superior será mejor. Principio de la responsabilidad total: la responsabilidad de una persona ante su superior es total y ningún superior puede eludir su responsabilidad por la actuación de sus empleados. Principio de delegación por los resultados esperados: la autoridad delegada debe ser adecuada para asegurar la capacidad de obtener los resultados esperados.
BIBILIOGRAFIA
http://moblibar.com.mx/articulos/index.php?option=com_content&task=view &id=3566&Itemid=62
www.ldv.com.ar/alumnos/orgemp/del_aut.doc